Hacía mucho tiempo que no entrábamos en el mes de noviembre con la Sierra de Guadarrama tan nevada... parece que el invierno que viene promete mucha nieve.
Pero todavía estamos en pleno otoño y hoy toca pasear por uno de los míticos bosques de San Lorenzo de El Escorial: El Bosque Real de La Herrería.
Nos acompañan Joaquín, Mª del Mar, Raquel y Jose Mª, procedentes de Madrid; y Daniel, vecino de San Lorenzo.
Este bosque ancestral depende hoy de Patrimonio Nacional, institución encargada de su protección y conservación.
Las lluvias otoñales han animado a florecer al Azafrán Serrano (Crocus carpetanus), que durante estos días embellece los suelos de los campos, repletos de hojas caídas de los árboles.
Además de Robles Melojos, Fresnos y Arces de Montpellier, el Bosque Real de La Herrería se caracteriza por los viejos castaños plantados por los Jerónimos en tiempos de Felipe II.
Azafrán Serrano (Crocus carpetanus). |
Hoy sobreviven viejos castaños en las laderas más sombrías del bosque que nos regalan ricas castañas cada temporada.
Aunque no hay muchas todavía en el suelo, hemos podido recolectar un buen puñado de castañas.
Y como es lógico, las lluvias otoñales animan también a los hongos a reproducirse, lo que nos permite disfrutar también de esa rica biodiversidad oculta que permanece en todos los bosques.
Corpinus picaceus. |
Entre otras setas, hoy hemos localizado varios Coprinos (Coprinus picaceus) y alguna Amanita (Amanita citrina).
Amanita citrina. |
Mientras nos adentramos en la profundidad del bosque, les mostramos a nuestros acompañantes algunos de los secretos botánicos mejor guardados por este magnífico ecosistema.
Hemos escuchado al Arrendajo, al Pico Picapinos y hemos visto algunos Trepadores por los árboles.
En las zonas altas del bosque hemos disfrutado del color verde de los prados y de las bellas panorámicas del Monte Abantos.
No siempre estuvo así el Monte Abantos: Ese manto verde que cubre hoy sus laderas se lo debemos a los naturalistas del siglo XIX que realizaron en él la primera gran reforestación hecha en España.
Elegimos un buen emplazamiento para realizar un alto en el camino.
Descendemos por una de las laderas del macizo de Las Machotas donde localizamos algunos excrementos de corzo y hozaduras de jabalí.
De regreso a San Lorenzo, visitamos la Cueva del Oso y la Silla de Felipe II, principal destino turístico de El Escorial, después del monasterio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario